Era líder de la categoría de coches en el Rally Dakar durante la duodécima etapa que unía las zonas argentinas de Fiambalá y La Rioja.
Pero el piloto español de Volkswagen, Carlos Sainz se volvió a topar con la mala suerte. Cuando llevaba recorridos 79 kilómetros, su coche cayó por un barranco no señalizado y tuvo que abandonar la carrera.
Al parecer no sufrió lesiones, peor fortuna corrió su copiloto Michel Perin, que parece haber tenido una fractura en el omoplato.
Ambos fueron trasladados en helicóptero al parque de asistencia, donde se atendieron a los dos corredores.
El español llevaba seis victorias de las diez etapas que se habían disputado, y lideraba la categoría de coches con una ventaja de casi media hora. Tenía muchas posibilidades de proclamarse campeón, pero no pudo ser.
Su debut en esta carrera fue en 2006, y éste era su tercer Rally Dakar. En su primera carrera tampoco tuvo la suerte consigo, quizás por inexperiencia en la modalidad quedó atrapado en una duna y no pudo terminar la carrera.
Al año siguiente acabó en novena posición. Aunque tuvo problemas técnicos consiguió traspasar la línea de meta.
Este año tenía todo de cara a la victoria, pero tuvo que abandonar.
Cuando se proclamó bicampeón del mundo de Rallies con su Toyota Celica agotó toda su suerte y a partir de ahí se recuerdan trágicos momentos. El más famoso que se mantiene en la memoria de sus seguidores fue en 1998 con la frase: “¡Trata de arrancarlo Carlos, trata de arrancarlo!”. No creo que haga falta explicar ese doloroso momento.
Esperemos que el piloto no se dé por vencido y que al año que viene vuelva a intentarlo a ver si, por fin, consigue otros títulos. ¡Ánimo!
Pero el piloto español de Volkswagen, Carlos Sainz se volvió a topar con la mala suerte. Cuando llevaba recorridos 79 kilómetros, su coche cayó por un barranco no señalizado y tuvo que abandonar la carrera.
Al parecer no sufrió lesiones, peor fortuna corrió su copiloto Michel Perin, que parece haber tenido una fractura en el omoplato.
Ambos fueron trasladados en helicóptero al parque de asistencia, donde se atendieron a los dos corredores.
El español llevaba seis victorias de las diez etapas que se habían disputado, y lideraba la categoría de coches con una ventaja de casi media hora. Tenía muchas posibilidades de proclamarse campeón, pero no pudo ser.
Su debut en esta carrera fue en 2006, y éste era su tercer Rally Dakar. En su primera carrera tampoco tuvo la suerte consigo, quizás por inexperiencia en la modalidad quedó atrapado en una duna y no pudo terminar la carrera.
Al año siguiente acabó en novena posición. Aunque tuvo problemas técnicos consiguió traspasar la línea de meta.
Este año tenía todo de cara a la victoria, pero tuvo que abandonar.
Cuando se proclamó bicampeón del mundo de Rallies con su Toyota Celica agotó toda su suerte y a partir de ahí se recuerdan trágicos momentos. El más famoso que se mantiene en la memoria de sus seguidores fue en 1998 con la frase: “¡Trata de arrancarlo Carlos, trata de arrancarlo!”. No creo que haga falta explicar ese doloroso momento.
Esperemos que el piloto no se dé por vencido y que al año que viene vuelva a intentarlo a ver si, por fin, consigue otros títulos. ¡Ánimo!
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